La Intendencia de Paysandú continúa ejecutando obras viales de impacto directo en el interior del departamento. En la zona de Constancia, los trabajos en el Camino Las Avenidas avanzan a muy buen ritmo y ya alcanzan un 80% de ejecución, según informó el director de Vialidad, Juan Carlos Turban. Se trata de una intervención largamente reclamada por los productores de la zona, que veían seriamente afectada su actividad cada vez que las lluvias volvían intransitable el camino.
Turban explicó que la obra implica una inversión de 72 millones de pesos y responde a una decisión política del Ejecutivo departamental de priorizar zonas productivas estratégicas. “Estamos hablando de un área con una cuenca lechera, agrícola y ganadera muy importante. Este camino era muy demandado porque, cuando llovía, tanto los productores lecheros como los agricultores quedaban prácticamente enterrados, con enormes dificultades para salir”, señaló.
Avances concretos y plazos definidos
El proyecto comprende la intervención de 9 kilómetros de camino. A la fecha, 7 kilómetros ya cuentan con cementado y tratamiento doble, mientras que restan 2 kilómetros para completar la obra. De ese tramo pendiente, uno aún debe ser cementado, y el restante será abordado tras la licencia de la construcción, que finaliza esta semana.
“Cuando retomemos las tareas, comenzaremos con la pavimentación de lo que resta y luego avanzaremos con la señalización vertical y horizontal”, detalló Turban, quien adelantó que, de mantenerse este ritmo, la obra podría ser inaugurada a comienzos del próximo año. “La realidad cambió y los vecinos ya lo están percibiendo. Muy pronto podrán disfrutar plenamente de este camino”, afirmó.
Un modelo que se replica en el departamento
El director de Vialidad destacó que esta intervención forma parte de una línea de trabajo sostenida que la Intendencia viene desarrollando en distintos puntos del departamento. En ese sentido, recordó obras similares ejecutadas en Piñera-Morató, Cañas del Pueblo y ahora Constancia. “Es el mismo camino que venimos transitando y que vamos a seguir profundizando junto al Ejecutivo departamental”, aseguró.
Estas obras no solo mejoran la transitabilidad, sino que impactan directamente en la productividad, el acceso a servicios y la calidad de vida de quienes viven y trabajan en el medio rural. La conectividad segura y permanente es clave para el transporte de la producción, el acceso a la educación y la salud, y la integración territorial.
Un plan de caminería ambicioso y en marcha
En paralelo, la Intendencia mantiene activo un ambicioso plan de caminería rural, que se ejecuta en coordinación con los municipios. Turban recordó que el objetivo trazado para el primer año del plan —de septiembre a septiembre— es intervenir 1.000 kilómetros de caminería en todo el departamento.
“Hoy ya llevamos cerca de 600 kilómetros intervenidos”, indicó, reconociendo que algunos caminos requieren mantenimiento más frecuente debido a su uso intensivo o a las condiciones climáticas. No obstante, subrayó que el balance es muy positivo y que el trabajo se está realizando de forma sostenida y planificada.
Un elemento clave para alcanzar estos volúmenes de intervención ha sido la inversión en maquinaria realizada en el período pasado. “Se invirtieron casi 3 millones de dólares para dotar de maquinaria a los municipios, y eso hoy nos permite, entre las alcaldías y la Dirección de Vialidad, afrontar esta cantidad de kilómetros”, explicó.
Infraestructura para el desarrollo del interior
Las obras en Camino Las Avenidas y el despliegue del plan de caminería reflejan una apuesta clara por fortalecer la infraestructura vial del interior profundo. Para la Intendencia, mejorar los caminos rurales no es solo una cuestión de obras públicas, sino una herramienta central para sostener la producción, promover el arraigo y reducir desigualdades territoriales.
Con trabajos que avanzan a buen ritmo y metas claras a corto y mediano plazo, la caminería rural vuelve a posicionarse como una de las prioridades de la gestión departamental.










