En la media hora previa de la última sesión de la Junta Departamental de Paysandú, la edila del Partido Nacional Patricia Vázquez Varela realizó una extensa exposición en la que alertó sobre la situación crítica del programa de salud bucal escolar, una iniciativa que según recordó nació como una política de Estado orientada a reducir inequidades y garantizar atención integral a niños de escuelas rurales y de contexto crítico.
Vázquez Varela comenzó contextualizando el origen del programa, iniciado oficialmente en 2005 durante la primera administración del entonces presidente Tabaré Vázquez, con la presidencia de María Auxiliadora Delgado. La propuesta apuntaba a un abordaje integral de la salud bucal desde la infancia, incorporando incluso tratamientos de ortopedia maxilar para corregir problemas de desarrollo. “Era una herramienta pensada para reducir desigualdades y promover salud desde edades tempranas”, subrayó.
De una política integral a una fuerte retracción
Según detalló la edila, en su momento el programa llegó a atender a unos 75.000 niños por año en todo el país. Sin embargo, esa cifra comenzó a descender de manera sostenida en los últimos años. En 2019, la cobertura alcanzaba a unos 63.000 escolares, mientras que en la actualidad se habría reducido a alrededor de 35.000, es decir, menos de la mitad de su pico histórico.
A esta caída en la cantidad de niños atendidos se suma una reducción significativa del personal. El equipo original, compuesto por unos 142 odontólogos, se habría reducido a aproximadamente 80 profesionales, sin que el presupuesto del programa haya registrado variaciones sustanciales a lo largo de los distintos cambios de administración. Para Vázquez Varela, estos datos configuran un “desmantelamiento progresivo” del proyecto.
Cambios institucionales y nuevo enfoque
En su exposición, la edila repasó los cambios institucionales que atravesó el programa. Inicialmente dependiente de Presidencia de la República, pasó al Ministerio de Salud Pública durante la administración de José Mujica. Posteriormente, en la Rendición de Cuentas de 2018, durante el segundo gobierno de Vázquez, se creó en ASSE la Unidad de Educación, Prevención y Diagnóstico de Salud Bucal Escolar, que absorbió el programa existente y también los de salud bucal, auditiva y visual.
Según la denuncia, a partir de esta reorganización se produjo un cambio de enfoque que dejó de priorizar a la población infantil. Vázquez Varela afirmó que actualmente el foco estaría puesto en la atención de adultos, mientras que en el caso de los niños se habría impartido la orden de no iniciar nuevos tratamientos de ortopedia funcional hasta el año 2026, lo que genera una brecha asistencial difícil de revertir.
Pedido de informes y advertencia política
Ante este escenario, la edila recordó que el senador nacionalista Martín Lema presentó un pedido de informes dirigido a ASSE y al Ministerio de Salud Pública, solicitando explicaciones por la presunta reducción de recursos en programas clave de salud bucal y ortopedia funcional. La iniciativa surge, según indicó, a partir de quejas recibidas por funcionarios del propio sistema, quienes advierten que el plan “está en riesgo”.
Vázquez Varela calificó la situación como “un recorte inadmisible” y señaló que resulta contradictorio con un gobierno que ha manifestado públicamente que la primera infancia es una prioridad. “No se puede declamar la defensa de los niños y, al mismo tiempo, desmantelar programas que han demostrado resultados concretos durante casi dos décadas”, expresó.
Finalmente, la edila compartió el pedido del senador Lema y exhortó a que ASSE rinda cuentas, brinde garantías de continuidad y asegure que los tratamientos en curso no se interrumpan. “La salud bucal infantil no puede ser una variable de ajuste”, concluyó, dejando planteada la preocupación en el ámbito departamental y reclamando respuestas a nivel nacional.








