El dirigente del Partido Nacional, Jorge Larrañaga Vidal, anunció que presentará un proyecto de ley sobre el abordaje interinstitucional de la inteligencia en materia de seguridad ciudadana, una vez que asuma la suplencia en la Cámara de Senadores, tras la votación del Presupuesto Quinquenal. La propuesta —que ya cuenta con respaldo técnico y político busca dar un marco normativo a la coordinación y el intercambio de información entre organismos estatales a nivel departamental, con el fin de fortalecer la seguridad pública en todo el país.
Larrañaga Vidal explicó que el proyecto se encuentra “pronto y trabajado junto a asesores técnicos y autoridades del Ministerio del Interior y la Jefatura de Policía”. El objetivo, señaló, es implementar un modelo que pueda aplicarse en los 19 departamentos, dotando de herramientas legales a las instancias locales para actuar de forma más coordinada e inteligente ante los desafíos de la seguridad ciudadana.
“Creemos que es un buen proyecto para abordar la seguridad a nivel departamental y que puede replicarse en todo el país, dándole un marco normativo a algo que nos parece central: la organización, la coordinación y el tratamiento de la información con inteligencia”, destacó el dirigente.
Una propuesta integral e interdisciplinaria
La iniciativa parte del reconocimiento de que la seguridad no depende únicamente de la Policía, sino que requiere la cooperación de distintas instituciones del Estado que tienen contacto directo con la comunidad.
“En cada departamento hay funcionarios del MIDES, INAU, salud, educación y otras áreas que, por el trabajo que realizan, cuentan con información muy relevante. Esa información puede ser clave para prevenir situaciones de riesgo, conflictos familiares, consumo problemático o incluso hechos delictivos”, explicó Larrañaga Vidal.
El dirigente sostuvo que muchos de estos funcionarios —por su cercanía con poblaciones vulnerables— detectan situaciones que podrían anticiparse si existiera un canal institucional de intercambio, pero actualmente esa información no se comparte o se maneja de forma aislada.
“La idea es que esa información se trate con reserva, profesionalismo y bajo un marco de inteligencia, dentro de un ámbito interdisciplinario. Que haya cooperación real, con protocolos claros y permanentes, no solo cuando ocurre un hecho puntual”, remarcó.
Del trabajo aislado a la cooperación permanente
Según Larrañaga Vidal, la falta de coordinación entre instituciones provoca que las respuestas del Estado sean reactivas y desarticuladas.
“Muchas veces se actúa después del problema, cuando ya ocurrió el delito o el conflicto. Corremos la coneja de atrás, sin información suficiente y sin aprovechar el conocimiento que ya tienen los equipos de trabajo en territorio”, señaló.
Con este proyecto, el Partido Nacional busca institucionalizar un espacio de trabajo continuo entre organismos públicos, donde se analice información, se compartan alertas tempranas y se definan estrategias conjuntas de prevención.
“La seguridad no puede depender solo de la represión o de los operativos. Debe ser un trabajo preventivo, sostenido y coordinado, con todos los actores del Estado involucrados”, agregó.
Un modelo que podría extenderse a todo el país
El plan piloto se implementaría inicialmente en Paysandú, donde Larrañaga Vidal ha mantenido diálogo con autoridades policiales y referentes institucionales, pero la intención es que el esquema pueda replicarse en los 19 departamentos, adaptándose a las realidades de cada territorio.
El proyecto será presentado formalmente en el Senado, donde el dirigente nacionalista ejercerá su suplencia, y se espera que reciba el apoyo de distintos sectores políticos, dado que apunta a mejorar la gestión de la información y fortalecer la prevención sin aumentar la burocracia ni generar estructuras nuevas.
“Esto no se trata de crear más organismos, sino de aprovechar mejor los que ya tenemos. Si todos los actores del Estado trabajan juntos, con inteligencia y coordinación, la seguridad y la convivencia ciudadana van a mejorar sensiblemente”, concluyó Larrañaga Vidal.
En síntesis, la propuesta busca pasar de una seguridad reactiva a una seguridad preventiva e inteligente, donde el intercambio de información entre instituciones sea sistemático, reservado y orientado a resultados. Una apuesta a la cooperación, la profesionalización y la eficiencia del Estado en su tarea más esencial: proteger a los ciudadanos y garantizar la convivencia en paz.